Por un lado, el devenir normal de las asociaciones que llevan mucho tiempo en la palestra; por otro, los inconvenientes y falta de colaboración que había que ir sorteando en los últimos años; por último, el que hay poco que celebrar (sobre esto, ya hablaremos en otra ocasión)
Si han sido pocos los que la han echado de menos, pues no se ha perdido nada y si han sido muchos, habrá que reconsiderar el próximo año la decisión tomada éste.
Aunque hemos dicho que hay poco que celebrar, sí es cierto que hay pequeñas alegrías que animan a seguir. Una de ellas tiene relación con la entrada "Decepción" del blog "A través de mi cámara". Entre otras cuestiones, se narra la corta vida de un luchador, un pequeño zorrillo con graves heridas (puede que no sea muy popular hablar de zorros en nuestra tierra, pero, a estas alturas, a uno le va trayendo sin cuidado esta cuestión) Se habla de una cierta recuperación del animal, pero ahora, a 21 días del inicio de los cuidados, podemos aventurar que ya está casi totalmente recuperado; sólo le queda crecer un poco más para poder valerse por sí mismo.
Como prueba de ello mostramos dos vídeos de la cámara de fototrampeo con la que seguimos su evolución (su actividad es, fundamentalmente, nocturna o crepuscular)
Guadamatilla