El día 5 de julio, sobre las 12,30, recibimos una llamada de Marisol, perteneciente
al grupo que, en el Ayuntamiento de Pozoblanco, está inventariando el
patrimonio cultural de esta localidad. Nos notificó que en el paraje de Navaliebre,
cercano al Santuario de la Virgen de Luna, había un buitre leonado (Gyps fulvus) que no podía
volar y que se veía en mal estado.
Nos pusimos en contacto con el CREA Los Villlares y nos
comunicaron que en ese momento estaban recogiendo otros animales en la zona de
Hornachuelos y no se podían desplazar por él hasta la tarde; no obstante, pudimos
contactar con un agente que estaba efectuando un recorrido por la comarca y que
sí podría pasarse a recogerlo.
Sobre las 13,30, acompañados por Marisol, dos miembros de
Guadamatilla se dirigieron al paraje de Navaliebre a intentar capturar el
buitre. Cuando estaban llegando vieron uno volando y sospecharon que el
individuo buscado podía haber remontado el vuelo. Pero no fue así,
pues a unos cientos de metros lo encontraron a la sombra de una encina; aunque
emprendió un corto vuelo rápidamente pudo ser capturado. Se trataba de un juvenil
con claros síntomas de desnutrición.
El pico del buitre leonado asoma por la toalla que lo cubre |
El buitre leonado totalmente cubierto por una toalla para evitar, en la medida de lo posible, que el animal se estrese |
Puestos en contacto de nuevo con el CREA Los Villares
pudimos quedar con el agente de medio ambiente que estaba por la comarca y a
las 14,30 se le entregó el buitre en Alcaracejos. Tras ser hidratado fue llevado camino
del CREA.
En estos tiempos que nos está tocando vivir, hay personas que
critican a las ONG por recurrir a subvenciones públicas, pero olvidan que cada
una en su ámbito de actuación suplen o complementan, en muchos casos, actuaciones
que corresponden a la administración, y ello con un coste considerablemente menor.
Pero tampoco hay que olvidar que las propias ONG necesitan el apoyo de personas,
que como Marisol y sus compañeros, en este caso, se bridan a colaborar.
Guadamatilla