Si el pasado año los participantes fueron numerosos, este año prácticamente han desbordado las previsiones de las entidades organizadoras (Ventana Abierta, Plataforma Anticementerio Nuclear y Guadamatilla), y los casi 200 bocadillos y refrescos que se dan al final han venido más que justos.
Gracias a todos los participantes (muchos niños y jóvenes, familias completas -o casi-, los incombustibles de siempre) y a los que nos acompañan en las calles por las que discurre la marcha.
Gracias al Ayto de Pozoblanco y a Protección Civil por su colaboración.
Guadamatilla